Cuando una célula está correctamente nutrida, activa su capacidad natural de multiplicarse y regenerar los tejidos de tu organismo. Este proceso no solo favorece la renovación interna, sino que también mejora de forma notable las funciones vitales del cuerpo, promoviendo un estado general de bienestar.
Esta etapa es considerada una de las más importantes, ya que si algún tejido se encuentra dañado, inflamado o en mal estado, los aminoácidos esenciales y vitaminas presentes en Lebasi —especialmente del complejo B y la vitamina C— actúan directamente en su reparación.
Además, gracias a los antioxidantes naturales contenidos en el suero de leche, se protegen las células sanas del estrés oxidativo, ayudando a prevenir alteraciones celulares que podrían derivar en enfermedades degenerativas, como el cáncer.
Por otro lado, si existe alguna herida externa, la aplicación tópica del suero de leche Lebasi también puede ser de gran ayuda.
Su alto contenido en vitamina C estimula la producción de colágeno, acelera la regeneración celular de la piel y favorece una cicatrización más rápida y efectiva.
Lebasi no solo nutre tu cuerpo: impulsa su capacidad de sanar, renovarse y protegerse, desde adentro hacia afuera.